El Ayuntamiento de Motril prepara una nueva ordenanza para la conservación de edificios en la que incluye las obligaciones legales que tienen sus propietarios de mantenerlos en buen estado e incluso de demolerlos en caso de que supongan un riesgo por su estado de abandono. El teniente de alcalde responsable del área de Urbanismo, Antonio Escámez, ha explicado que la normativa municipal, que se encuentra en fase final de redacción, contiene las obligaciones de conservación, mantenimiento e incluso ejecución de las edificaciones previstas por el planeamiento por parte de propietarios de inmuebles y solares.
Escámez, a quien acompañaban los ediles Gloria Chica y David Martín, ha hecho este anuncio durante la visita a las obras de demolición de una vivienda en la calle Buen Pastor cuyo estado de abandono había sido denunciado durante años por los vecinos y por los partidos que ahora forman el equipo de Gobierno.
“Llevamos desde 2011 reclamando la demolición de esta vivienda. Lo pedían los vecinos y lo hemos reclamado con mociones a Pleno tanto PSOE como PA. La verdad es que la situación era insoportable y había peligro para los vecinos, así que una de las primeras gestiones que hicimos desde el equipo de Gobierno fue ponernos en contacto con los propietarios para que la derribaran”, ha explicado Antonio Escámez.
“Había que poner de acuerdo a cinco herederos para poder derribar pero el peligro de ruina y la responsabilidad, que recaía sobre ellos, ha dado lugar a que llegáramos a un acuerdo y la tiraran abajo. No ha sido fácil pero de esta forma acabamos con un foco de infección y de otras cosas menos agradables. Ya, por ejemplo, no tendrá que venir el GRUMEN a ver si hay chicos que debieran estar en su centro educativo. Hemos sido capaces de hacer estas gestiones desde el Gobierno para cumplir con un compromiso con los vecinos y ahora quedará un solar tapiado”, ha comentado Escámez.
El teniente de alcalde ha afirmado que la entrada en vigor de la ordenanza de conservación, conocida como ITV de viviendas, no es una medida recaudatoria, “sino que se trata de algo obligatorio y necesario para la convivencia en nuestra ciudad”.
“Se van a derribar aquellos inmuebles que no cumplan la normativa de habitabilidad y estética. Así, pondremos coto a muchas escombreras, casas que se vienen abajo o descampados llenos de vegetación y ratas. Desde hace varios años, cuando estábamos en la oposición, hemos denunciado casos de edificaciones, generalmente casas unifamiliares abandonadas, que estaban en un lamentable estado de conservación, suponiendo un importante riesgo para la seguridad de los vecinos, además de haberse convertido, en muchos casos, también en foco de insalubridad como consecuencia de vertidos de residuos u ocupaciones sin control”, ha argumentado Antonio Escámez.
“Afortunadamente, ahora, desde el Ayuntamiento se han activado los mecanismos de control de estas situaciones, localizando a sus propietarios para que atiendan sus obligaciones e incluso habiéndose practicado ya algunas actuaciones de oficio y demoliciones”, ha declarado el teniente de alcalde, quien ha informado que actualmente hay 32 expedientes de casas con riesgo de derrumbe que deben ser rehabilitadas o demolidas por su propietarios.
“El de la calle Buen Pastor ha sido el primero. Era algo muy necesario. A partir de aquí, las que tengan riesgo de derrumbe se les abrirá expediente para que procedan a demolerla y cierren posteriormente el solar” ha especificado Escámez, que ha añadido que esta normativa, además, “es buena para que no haya especulación con los inmuebles. Y es que hay muchas zonas donde incluso han dado lugar a que nazcan higueras. Eso no cabe en una ciudad moderna como queremos que sea Motril. Son desmanes urbanísticos que de esta forma se van a acabar”, ha concluido Antonio Escámez.