La consejera de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Carmen Ortiz, ha anunciado que este departamento, la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, y la Diputación Provincial de Granada están trabajando conjuntamente en la preparación de un plan de barrido cero de la costa de la provincia, donde se concentran las explotaciones de agricultura bajo plástico, para “eliminar todos los restos de cosechas”. Ortiz ha hecho este anuncio junto al presidente de la Diputación granadina, José Entrena, con quien ha coincidido en Motril en el acto de presentación del nuevo Programa de Implantación de Cultura Preventiva del grupo La Caña. El barrido cero de la costa granadina contará también con la colaboración de los ayuntamientos, según ha comprometido la alcaldesa de Motril, Flor Almón.
Esta actuación incluiría la limpieza de cauces, caminos y zonas rurales y se enmarcaría dentro de la Estrategia de Gestión de Residuos Vegetales en Horticultura elaborada por las consejerías de Agricultura, Pesca Desarrollo Rural y de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio y que hasta el 15 de julio está expuesto en las páginas webs de ambas, abierto a recibir sugerencias y aportaciones de entidades interesadas. La idea del plan conjunto con la Diputación es retirar todos los restos que haya en la costa granadina previamente a que se empiecen a aplicar las medidas de gestión incluidas en la Estrategia.
El borrador de de este programa, que se presentó al sector hace una semana, incluye un amplio abanico de actuaciones para reducir la generación de restos vegetales y gestionarlos mejor; investigar, formar y transferir resultados; y mejorar la gobernanza administrativa, armonizando la legislación y facilitando los trámites para nuevas plantas de tratamiento.
En su visita a Motril, Carmen Ortiz, ha recordado el anuncio que realizó el lunes la presidenta de la Junta, Susana Díaz, sobre la próxima convocatoria de una línea de ayudas para la modernización de invernaderos que estará dotada con 20 millones de euros. Ortiz ha enfatizado que esta es una medida más que muestra “el respaldo de la Junta a los productores que apuestan por mejorar sus instalaciones para avanzar en la sostenibilidad de la actividad agrícola”.
Estas subvenciones, que se enmarcan en el nuevo Programa de Desarrollo Rural (PDR) de Andalucía 2014-2020, respaldarán hasta el 50% de las inversiones de los agricultores dirigidas a la modernización de sus invernaderos. El principal objetivo de esta línea de ayudas es animar a los productores a renovar las infraestructuras que hayan superado su vida útil, que varía entre 10 y 15 años en función del tipo de instalación y la zona de cultivo donde se localice.
Cultura preventiva
Durante su intervención en el acto de presentación del Programa de Implantación de Cultura Preventiva de las empresas hortofrutícolas Miguel García Sánchez e Hijos y Eurocastell, que forman el grupo La Caña, la consejera ha animado a los trabajadores a “participar activamente” en él. La consejera ha valorado la “responsabilidad y el compromiso” que demuestran estas empresas con la sociedad al querer “ir más allá de las obligaciones legales en materia de seguridad y prevención de riesgos laborales”.
El sector agroalimentario está evolucionando en los últimos años y, gracias a la tecnología, hoy se pueden dejar atrás los índices de siniestralidad de este tipo de actividades, que estaban muy condicionadas por las exigencias físicas del trabajo o las herramientas que se utilizan. “Contamos con los instrumentos para reducir al mínimo los riesgos en el entorno del trabajo y mejorar la seguridad de todos, algo que a la larga no sólo mejora la rentabilidad de la empresas, sino también el clima laboral, la productividad y la relación con los clientes”, ha resaltado la consejera.
Entre las actuaciones que contempla el Programa de Implantación de Cultura Preventiva se incluyen inversiones en tecnología, incentivos al personal, mayor información y transparencia, estudios e innovación en la mejora de las condiciones del trabajo e incluso una mayor implicación de los familiares de los agricultores y trabajadores de las empresas.
Respaldo a las inversiones del sector
Carmen Ortiz ha animado al sector a aprovechar los incentivos que tiene a su disposición y que suponen unos “potentes instrumentos para impulsar al sector agrario hacia mayores cotas de competitividad y sostenibilidad, con unas explotaciones e industrias seguras y rentables”.
Actualmente están abiertas dos convocatorias de ayudas a inversiones que mejoran la seguridad y rentabilidad: las subvenciones para la modernización de explotaciones, con un presupuesto de 29,7 millones de euros (10,2 millones de euros para el olivar); y las ayudas a la transformación y comercialización de productos, cuyo presupuesto supera los 37 millones de euros (11,1 millones de euros para el sector olivarero). A estas líneas se sumará próximamente la convocatoria de la ayuda específica para la mejora de invernaderos.
Grupo La Caña
El grupo empresarial La Caña se dedica a la comercialización y exportación hortofrutícola y cuenta con dos centros de manipulados ubicados en Motril y Castell del Ferro, a los que se suman almacenes de recogida de productos en Carchuna, Castillo de Baños, Albuñol, Busquístar, Jatar y Arenas del Rey.
La Caña cuenta con una amplia gama de productos hortofrutícolas que van desde frutas tropicales como aguacates (9,2 toneladas), mangos (cerca de 365.000 kilos) y chirimoyas (más de 386.000 toneladas), hasta cultivos de invernadero como tomate (38,3 toneladas) o pepino (casi 35 toneladas) y, en menor medida, sandía, melón y judía verde. Cuenta con una plantilla de 1.300 trabajadores y, en total, el grupo reúne a 2.400 agricultores.
En 2015 comercializó 88 millones de kilos de frutas y hortalizas valorados en 125 millones de euros. El 70% de la producción se vende en el exterior, a mercados como Alemania y Holanda, que representan, respectivamente, el 27% y el 13% de las exportaciones. Este grupo es el mayor exportador de aguacate de la provincia de Granada.