La temporada de Rebajas de verano ha comenzado y los pequeños y medianos comercios, junto a las grandes cadenas, ofrecen importantes descuentos en multitud de productos, algo que anima a los consumidores a buscar las mejores ofertas. Por ello, desde el Ayuntamiento de Motril, a través de la concejalía de Salud y Consumo, se han ofrecido algunas recomendaciones para esta nueva campaña de rebajas estivales, que se extiende desde el 1 de julio hasta el 31 de agosto, ambos inclusive.
La alcaldesa de Motril, Flor Almón, ha animado a todos los motrileños y motrileñas a comprar en los numerosos comercios de la ciudad, “siempre cercanos en su trato al cliente y con productos y artículos muy diversos y de primerísima calidad”.
“Nos sentimos muy orgullosos de los comerciantes de nuestra ciudad. Hacen de Motril un reclamo para toda la comarca, convirtiéndolo en el verdadero referente comercial de la Costa. Siempre vamos a estar a su lado, para que continúen trabajando con esfuerzo e ilusión, dinamizado y revitalizando nuestro centro histórico, y generando riqueza”, ha expresado Almón.
El edil responsable del área de Salud y Consumo, David Martín, ha recordado que las rebajas consisten en una oferta a los consumidores, una reducción de los precios habituales o de unas condiciones especiales de venta que abaratan el producto.
“Antes de comenzar el periodo de rebajas, estos artículos poseen un precio más alto y tras el inicio, presentan un precio menor. En ningún caso la reducción de precio debe afectar a la calidad, a su garantía ni a los derechos de los consumidores”, ha explicado Martín, quien ha advertido que no pueden confundirse los productos rebajados con aquellos ensaldo o con liquidaciones.
“Los primeros son artículos que presentan un precio más bajo debido a defectos, uso o envejecimiento, mientras que los segundos se ofertan a importes más bajos debido al cese total o parcial, cambio o traslado del negocio, estando los casos en los que se pueden ofrecer liquidaciones fijados por ley. Asimismo no pueden venderse dentro del periodo de rebajas los que estén deteriorados por alguna causa o aquel género que no haya estado dispuesto en el establecimiento para su venta con un mes de antelación a la fecha de inicio de la campaña”, ha manifestado el concejal de Salud y Consumo.
David Martín ha subrayado que es fundamental planificar las compras, sobre todo los primeros días de rebajas, ya que se puede caer de forma compulsiva en la adquisición se productos que no se van a utilizar. Para ello es recomendable hacer una lista de los que artículos que se van a necesitar.
“Además, los comerciantes no tienen la obligación de devolver ningún producto a no ser que este defectuoso de fabricación pero, si durante el resto del año un establecimiento anuncia que admite devoluciones, las tiene que aceptar también durante este periodo de rebajas. No hay que olvidar nunca exigir el ticket y guardarlo hasta pasado el periodo de devolución reflejado en el mismo”, ha indicado.
También es recomendable preguntar en el comercio si las devoluciones se hacen por el importe del producto, por la entrega de otro de similares características o por vales. Estos últimos no caducan, y se pueden utilizar en cualquier momento del año.
Cualquier artículo adquirido antes del periodo de rebajas y devuelto durante éste debe ser reembolsado por el valor que tenía cuando fue comprado.
Por otro lado, la etiqueta del artículo debe reflejar tanto el precio anterior a las rebajas como el nuevo precio. Si la rebaja no afecta a todos los productos del establecimiento, los que tengan el descuento debe de estar claramente diferenciadas de los que no.
Desde la concejalía han incidido en que cualquier producto rebajado que se encuentren en el escaparate debe llevar puesto los precios de modo visible para el consumidor. Además, cuando en un establecimiento figure el cartel de ‘Rebajas’, estas deben afectar al menos a la mitad de los artículos en venta, y todos deben cumplir con las normas de calidad y etiquetado. Los comerciantes no pueden anular la garantía de un producto que está rebajado.
Si el establecimiento admite tarjetas de crédito o débito como forma de pago, también debe admitir este sistema durante el tiempo que duren las rebajas. Es recomendable leer detenidamente las etiquetas, instrucciones de uso y características del producto antes de adquirirlo. También es útil conservar la publicidad ya que tiene un valor contractual.
David Martín ha hecho hincapié en que como consumidores, tenemos unos derechos entre los que se encuentran exigir las garantías post venta del producto así como el libro de reclamaciones, que todos los establecimientos deben de poseer, en caso no estar satisfechos con el artículo o el trato.
Los locales que utilicen anuncios o campañas publicitarias durante este periodo deben vender una cantidad acorde con la demanda y si no es así, el cliente tiene derecho a exigir que se le proporcione dicho artículo u otro de similares características.
Por último, el concejal de Salud y Consumo ha afirmado que ante cualquier duda, los ciudadanos pueden acudir a la Oficina Municipal de Atención al Consumidor (OMIC), situada en la calle San Rafael, a espaldas del Ayuntamiento.