La alcaldesa de Motril, Luisa María García Chamorro, felicitó ayer, públicamente, a todo el equipo humano que ha conseguido consolidar a la Charca de Suárez como uno de los grandes espacios naturales del sur de Andalucía, refiriéndose con ello tanto a quienes impulsaron el proyecto original, los que han trabajado en él a lo largo de su historia y al actual contingente de profesionales municipales, voluntarios, técnicos y personas vinculadas a la charca. El mensaje lo trasladó la alcaldesa durante la presentación del Cuaderno Ambiental número 29, dedicado a las mariposas nocturnas y realizado por Miguel Olvera; un acto en el que la primera autoridad municipal recordó el debate y la no poca polémica que generó, en los años 80, la idea de preservar nuestra Charca de Suárez: “Aquel sueño de unos cuantos ‘locos’ tuvo que enfrentarse a la incomprensión y el descrédito de una parte muy importante de la sociedad local, que no concebía este espacio más que como un foco de infección, un criadero de mosquitos y ratas o un obstáculo para el desarrollo urbanístico de la Playa de Poniente”. García Chamorro hizo memoria sobre aquellas críticas “que se cebaron contra lo que se denominó “un capricho de los ecologistas”, pero bienvenido sea este término si con él nos referimos a un grupo de personas que no conciben el futuro si no lo planificamos sobre la base del respeto absoluto a nuestro entorno, a su legado natural e incluso histórico y a la defensa de sus valores como una garantía absoluta de la sostenibilidad de la zona, de la pervivencia de sus recursos y del respeto que debemos a las generaciones venideras”.
Para la alcaldesa, afortunadamente, ni se desecaron las charcas ni hubo más bloques de pisos. “Y nadie, nadie, podía pensar en aquellos años que con el paso del tiempo Motril convertiría la Charca de Suárez, ‘su charca’ en un emblema de ese mismo desarrollo turístico que pretendía acabar con ella”. En este contexto, García Chamorro se congratuló del esfuerzo de difusión y divulgación que camina paralelo al día a día de la charca: “Y sí, hasta los seres más diminutos y aparentemente invisibles tienen su espacio y son los que construyen nuestro medio ambiente desde el eslabón más bajo de la cadena de la vida”. En este caso concreto, han sido las mariposas nocturnas, uno de los grandes espectáculos naturales de la charca, las que protagonizan el número 29 de los Cuadernos Ambientales, editado por el Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Agricultura del Ayuntamiento de Motril, bajo la coordinación de Fermín Jiménez y Fernándo Alcalde. Un extraordinario trabajo realizado por Miguel Olvera Rodríguez, “a quien traslado mi enhorabuena por su exhaustiva investigación y exposición; de la misma forma que nuestro agradecimiento, siempre, a la Asociación Buxus y también, en este caso, a la Asociación para el Estudio y Conservación de los Lepidópteros y Odonatos Ibéricos”, dijo la alcaldesa.
Desde el Área de Medio Ambiente, el teniente de alcalde Antonio Escámez, no esquivó la emoción que él mismo destacó a la hora de referirse al trabajo “de todos, absolutamente de todos los que han construido, conservado y difundido los valores de la charca”. De hecho, y nombre por nombre, Escámez felicitó al gran equipo humano que siempre ha tirado del carro de la conservación de este espacio natural, “promoviendo una recuperación de flora y fauna que no tiene precedentes y de la que Motril tiene que estar muy orgulloso, porque este es un auténtico regalo de la naturaleza que se rescató, se mantiene y se hace cada vez más importante gracias al trabajo entregado de grandísimos profesionales”. El teniente de alcalde animó a los motrileños y a los visitantes a conocer y enamorarse de un gran espacio “que es un símbolo del Motril que queremos dejar a las generaciones futuras”. Por último, Escámez felicitó a todo ese gran equipo por mantener la trayectoria del Cuaderno Ambiental que ya suma quince años de historia.
En el transcurso del acto, el autor Miguel Olvera Rodríguez realizó una exhaustiva exposición del contenido del cuadernillo; una interesante apuesta de difusión que, en su puesta de largo, despertó el interés del público que asistió a su presentación en el Teatro Calderón.